Las miko 巫女
Sacerdotisas sintoístas
En los alrededores de los santuarios sintoístas japoneses, no es raro ver la figura de una joven ocupada en tareas de mantenimiento. Las miko, como se las llama, son parte integrante del culto ancestral japonés y uno de los emblemas de la religión sintoísta.
Un origen muy lejano
El origen de las miko se remonta al final del periodo Jōmon (14.000 a 300 a.C.), cuando las mujeres chamanes entraban en trances y se convulsionaban para transmitir los mensajes de las deidades. Con el paso del tiempo, fueron ganando importancia, prestando servicios religiosos y encargándose de diversas actividades políticas y sociales.
Desde el peroodo de Nara (710 - 794), los poderes políticos del archipiélago trataron constantemente de regular la actividad de las miko con el fin de controlarla y evitar abusos.
Durante el periodo Sengoku (1477 - 1573), la institución de las miko se vio afectada por el caos del país y muchas sacerdotisas vagaron por el país, convirtiéndose en arukimiko - literalmente, "miko itinerante" - y dedicándose a actividades similares a la prostitución.
Fue durante la era moderna, desde el periodo Edo (1603 - 1868) hasta el periodo Meiji (1868 - 1912), cuando se formalizó gradualmente su papel, ya que la práctica del chamanismo estaba prohibida bajo los Tokugawa mientras que la restauración imperial prohibió cualquier actividad espiritual a los miko.
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Las miko en la actualidad
Las miko que pueblan hoy los santuarios sintoístas son fácilmente reconocibles. Llevan una hakama roja, la chihaya (un kimono blanco con grandes piquetes), sandalias japonesas y, muy a menudo, un hanakanzashi, un adorno floral que sirve de tocado.
Se encargan de llevar la tienda del santuario, de ofrecer omikuji, de ayudar en el mantenimiento del santuario, de asistir al kannushi (sacerdote sintoísta a cargo del santuario), así como de realizar las danzas tradicionales, conocidas como miko-mai.
Estos trabajos suelen ser realizados por jóvenes vírgenes, en forma de trabajo voluntario o a tiempo parcial. Cuando se casan dejan de hacerlos.
Existen varios tipos de miko, tres categorías de acuerdo al etnólogo Kunio Yanagita:
jinja miko ("miko de santuario"), las miko que participan en danzas y rituales
kuchiyose miko ("miko medium"), las miko que hablan por los muertos
kami uba ("mujer de los dioses"), las miko encargadas del culto a las deidades
Al igual que otros símbolos ancestrales del país, las miko han pasado a formar parte de la cultura popular japonesa. A menudo representadas en el manga con una escoba en la mano en el corazón de los santuarios, tienen el carácter estereotipado de ser feroces y temperamentales.
Cuando son heroínas, demuestran excelentes habilidades en el dominio de la katana, la daga tantō o el arco yumi.
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