Los ryokan 旅館

Pasa las puertas corredizas, entra a la sala, quítate los zapatos, ponte las zapatillas dispuestas para ti, sigue al propietario del lugar: bienvenido al ryokan. Bien sea una pequeña posada familiar o un hotel de lujo, en el ryokan, los biombos de papel y las esteras tatami inmediatamente te sumergirán en un ambiente sereno y refinado.

Ryokan de ciudad, ryokan de campo

Originados durante el periodo Edo (1603-1868), los ryokan tradicionalmente se encuentran cerca de las aguas termales (onsen). Pero también hay unos 65.000 establecimientos que se encuentran en la ciudad, enclavados en el centro de Tokio, Osaka o Kioto, creando un espacio atemporal, alejado de la ruidosa ciudad.

Una forma de vida

Alojarse en un ryokan es perfecto para descubrir una amplia gama de tradiciones japonesas. Las habitaciones en las cuales se camina en calcetines o con los pies descalzos están siempre muy limpias.  A la hora de dormir, la mesa central le da paso a un futón que se desenrolla sobre el tatami. Los yukata (kimono de algodón ligero) se visten tanto para la cena como para un paseo por los jardines o para ir a los baños. En los ryokan la mayoría de los baños (interiores y al aire libre) son públicos y por lo general no son mixtos. El ritual de baño tiene dos etapas: primero hay que enjabonarse y enjuagarse en una habitación. Luego uno se sumerge con calma en la piscina de agua caliente junto a los otros huéspedes. ¡Qué relajante!

La comida

Después de relajarse en las aguas termales, otro punto culminante de la estancia espera por ti: la cena, o más precisamente, la kaiseki ryori, una comida tradicional que consiste en una multitud de pequeños platos (sopa de miso, arroz, tofu, pescado a la parrilla, pescado crudo, carne, verduras, encurtidos, tempura ...) a base de productos locales y de estación. La comida puede ser servida en la habitación o en la sala común, normalmente alrededor de las 6 de la tarde. El desayuno normalmente es arroz, sopa de miso, huevo o algas secas. Ambas comidas están incluidas en el precio de la estadía que fluctúa entre 15.000 y 30.000 yenes (entre 125 y 250 €).

Elegir un ryokan

Las ofertas y precios son muy variados. Puedes elegir desde un hostal sencillo hasta un hotel de lujo, típico del S.XIX, pasando por un hotel contemporáneo. Por ejemplo, tienes un ryokan exclusivo con vistas al Monte Fuji, al borde del lago Kawaguchi. O una posada familiar sin pretensiones cerca del parque Uneo en Tokio. O el spa de las aguas termales de Kurokawa en la isla de Kyushu. El ryokan, independientemente de su calidad, promete un cambio de escenario. Una experiencia de inmersión que no puede faltar en tu viaje a Japón.

Existen dos organizaciones que te pueden ayudarán a seleccionar el ryokan que más te convenga: la Japan Ryokan and Hotel Association y la Japanese Inn Group.

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