Las rutas de los peregrinos / Chôishi-michi 町石道
Los caminos de la fe
Si quieres seguirle los pasos a los primeros peregrinos de la secta budista Shingon, necesitarás unas buenas piernas. Los caminos sagrados serpentean las montañas y hacen que el cuerpo se eleve antes que el alma.
Los puntos de partida no están muy claros, pero no importa porque los caminos del Monte Koya tampoco tiene puntos de llegada, sólo se sabe que se llega al cansancio. Estos caminos que en su momento fueron usados por los peregrinos ahora se han convertido en populares rutas de senderismo. Y es comprensible pues probablemente esta es la forma más divertida de explorar las montañas y lugares históricos como la puerta Daimon.
Hay varias rutas disponibles, dependiendo del nivel y la motivación de cada quien.
La primera comienza en la puerta Daimon hasta llegar a un pequeño santuario en la cima del monte Bentengaku antes de descender a la estación de Kudoyama en la línea Nankai. No es una caminata muy difícil y se puede hacer en tres o cuatro horas, dependiendo de la condición física. Aquellos que tienen prisa puede subir con el teleférico y desde la cumbre disfrutar de la vista mágica de Wakayama y el océano.
Los más expertos pueden recorrer el Kohechi Trail que conecta a Koyasan con el santuario de Kumano. Este es un trayecto largo y extenuante que puede tomar hasta una semana. Así que hay que equiparse como corresponde.
Y si todo esto todavía no es suficiente, también se puede hacer un paseo de un poco más de dos horas, creado inicialmente sólo para las mujeres. Esta caminata sale de Okunoin y termina en Nyonindo, que en su época fue el único templo accesibles a las mujeres.