El hanami mezcla el ritual del sake con la admiración de la naturaleza
1.200 años de cerezos y su historia
Alain, nuestro guía, ha vivido en Japón por 15 años y se ha dedicado al estudio de su cultura, historia y múltiples aspectos de su civilización. Hoy nos habla del origen del hanami, su significado en la mente de los japoneses y cómo esta costumbre se ha convertido en un fenómeno cultural.
Japan Experience: ¿Cuáles son los orígenes de la contemplación de los cerezos?
Alain B.: Existen suficientes detalles sobre el origen de esta costumbre. Está vinculado a un antiguo rito de fertilidad celebrado al momento del sake joven, en primavera y otoño en los pueblos japoneses. En abril este ritual dio lugar al festival bajo los sakura (cerezos en flor en japonés).
JE: ¿Cuándo fue oficialmente el primer hanami?
AB: En el año 812 cuando el emperador Saga, fascinado por los cerezos en flor, celebró el primer hanami en el jardín Shinsen-en de Kyoto. El instituyó un día festivo que se celebró por mucho años. Luego los aristócratas empiezan a celebrar este día, luego fue el turno de los samuráis y finalmente del pueblo.
"El cerezo era el árbol donde vivía el dios del arroz"
Pero no fue hasta el periodo Edo (1603-1868) que el hanami se hizo popular y aparecen los callejones enteros llenos de cerezos como los que vemos hoy.
JE: ¿De dónde viene la palabra "sakura"?
AB: Hay varias etimologías. Una de ellas divide la palabra en sa y kura. Sa designa un antiguo dios de las plantas de arroz y del arroz cosechado, según el sintoísmo. Este dios también se asocia con el kami de los cereales, Inari. Kura significa almacén y se refiere a las antiguas casas sagradas sobre pilotes donde se guardaba el arroz. Por lo tanto, los japoneses veían al cerezo como el árbol donde vivía el dios del arroz.
JE: ¿Es el cerezo el único árbol cuyas flores son contempladas?
AB: No. Originalmente no sólo el sakura sino todos los árboles en flor se admiraban por su belleza. Si uno se refiere a Man'yōshū, la Colección de las Diez Mil Hojas, antología de poesía japonesa que data de 760, hay 43 poemas sobre el hanami del sakura y 110 para los ciruelos en flor. De hecho, el ciruelo chino, era favorecido por la aristocracia, en una época en la que Japón se inspiraba en la dinastía Tang de China. El sakura, un árbol nativo, era considerado vulgar.
"El hanami gradualmente se vuelve exclusivo del cerezo"
En el Kokinshu, colección que data de 905, nos encontramos con más de 18 poemas sobre ciruelos versus 110 que hablan de la belleza del sakura. Esto es ya la era Heian (794-1185): Japón cerró sus misiones en China y se vuelve a sí mismo para asimilar nuevos conocimientos. Este es también el momento de los jardines, especialmente el Heian, la antigua Kioto, entonces capital imperial. El famoso Sakuteiki, libro de jardinería que data de la segunda mitad del siglo XI, recomienda plantar cerezos. Así es como el hanami se vuelve exclusivamente de sakura.
JE: ¿Qué simbolizan los cerezos para los japoneses?
AB: El sakura simboliza la relajación, la falta de etiqueta. Esta es la época del año en que los japoneses, normalmente estrictos en su código de conducta social, se relajan y rompen la etiqueta. Puede ser algo parecido a los carnavales en Europa y América, por ejemplo.
"En los años 80, a los japoneses no les interesaba el hanami "
Los cerezo también tienen una profunda conexión con el arroz y el sake. Desde el período Nara (710-794), se acostumbraba contemplar los sakura bebiendo sake. El hanami es en realidad la fusión de dos tradiciones: la admiración de la naturaleza en los jardines por parte de los aristócratas y la fiesta del sake joven.
JE: ¿Qué lugar tienen los cerezos en las artes japonesas?
AB: Además de estar en la poesía, el sakura encuentra su lugar en las artes populares tales como las impresiones siglo XVIII. Estas muestran mujeres jóvenes bebiendo sake bajo los cerezos. Sin embargo, el sakura no está muy presente en el ukiyo-e, la pintura clásica o en el grabado.
JE: ¿Hay otras costumbres japonesas comparables al hanami?
AB: Sí, el hanami tiene su contrapartida: la tsukimi, la contemplación de la luna, que tiene lugar cuando ésta está más visible, las noches a finales de septiembre y principios de octubre.
JE: ¿Ha visto cambios en la costumbre de hanami?
AB: Cuando empecé mi carrera de guía en Japón a finales de los 1980, los japoneses no hablaban para nada del hanami. No les interesaba pues era vista como una práctica para gente mayor. Una fiesta más importante era el Tanabata, por ejemplo. En Tokio, los que celebraban el hanami eran sobre todo los extranjeros.
"Uno no se invita simplemente a un hanami"
Luego, a partir de finales de los 1990, vi cómo se convirtió gradualmente en una fiesta elegante. Los jóvenes en particular, han desarrollado una pasión por el hanami, comparable a la que tiene por los baños termales japoneses. El hanami es, pues, una festividad que cayó en desuso antes de ser re-popularizada por los jóvenes de hoy, quienes le dan nueva vida a las tradiciones japonesas. También vemos a estos mismos jóvenes vestidos con los trajes tradicionales durante los festivales de verano, lo cual es algo relativamente nuevo.
JE: ¿Qué consejo le daría a los viajeros que quieren ver los cerezos en flor?
AB: Yo no recomiendo que se fundan con las masas y que traten de hacer como los japoneses, botellas de licor en mano. No van a ser bien aceptados, a menos que sean invitados por los japoneses. En un hanami, la gente tiene sus propios espacios, uno no se entremezcla. Uno no se invita a uno mismo a un hanami. Aconsejo a los viajeros que disfruten de la atmósfera, sin imponerse.
JE: ¿Qué lugares recomiendas?
AB: En Tokio, que es la ciudad que mejor conozco, el Parque Ueno, el Palacio Imperial y a lo largo del río Meguro-gawa. Meguro es una zona agradable, ideal para gente joven, donde muchos hablan inglés. En Kyoto, hay que ir a uno de los muchos jardines de la ciudad. El castillo de Himeiji es también un lugar de elección.
Encuentra a Alain y a todos nuestros guías de excursiones guiadas, todos especialistas en Japón.